La posibilidad de extender las habilidades naturales de nuestro cuerpo mediante máquinas ha aupado a la humanidad desde los albores de la civilización. Sin embargo, nunca como ahora la tecnología había avanzado los suficiente como para permitir la integración de máquinas y cerebro de una manera tan íntima.
Las futuras interfaces cerebro-máquina buscan leer la actividad cerebral generando modelos predictivos del comportamiento con los que controlar dispositivos externos. De esta manera, el mundo tal y como lo conocemos ahora cambiará de manera irreversible.
Pero ¿cuán disruptivos son estos cambios?, ¿está amenazada nuestra especie como aventuran los transhumanistas?, o ¿es acaso esta solo una nueva revolución tecnológica? Discutiremos la ciencia detrás de las interfaces cerebro-máquina, sus amenazas y oportunidades, e identificaremos las claves que debería adoptar una ética
