CHICAS LISTAS
Nathalia Holt
La editorial Pinolia nos descubre la historia inedita de un pequeño grupo de cuatro espías que, tras la Segunda Guerra Mundial y durante la traicionera Guerra Fría, jugaron un papel decisivo en los precarios orígenes de la CIA, que ayudaron a crear un innovador modelo para el espionaje de vanguardia y que abrieron nuevos caminos para la igualdad de la mujer en el trabajo.
Gracias a una investigación meticulosa, entrevistas con agentes de inteligencia y documentación recientemente desclasificada, Holt ha podido crear el retrato de Adelaide Hawkins, Mary Hutchinson, Eloise Page y Elizabeth Sudmeier, cuatro mujeres cuya persistencia, talento y espíritu de lucha han sido fundamentales. Algunas empezaron en puestos de inteligencia y espionaje (códigos secretos, cifrados…) durante la contienda mundial antes de que se fundara la CIA (en 1947). Sin duda su llegada a la agencia supuso un gran cambio y avance. El pequeño grupo de pioneras agentes de inteligencia (conocidas como las «Chicas listas»de las novelas de espías. Eran inteligentes (se habían graduado siendo de las primeras de su promoción), si no no podrían haber competido en ese mundo, pero también atrevidas e innovadoras. Su trabajo contribuyó al desarrollo de nuevas herramientas y métodos de inteligencia. Además fueron inflexibles en su reclamación de una remuneración adecuada a su talento y equitativa a la de sus homólogos masculinos, lo que ayudó a otras mujeres a incorporarse en ámbitos laborales dominados por los hombres.