Snuff
“La película que dijeron que NUNCA se proyectaría” (el “NUNCA”, en mayúsculas). “El filme que solo podía haberse rodado en Sudamérica, donde la vida es BARATA” (el “BARATA”, también en mayúsculas). “La cosa más sangrienta jamás filmada frente a una cámara” (en este caso, sin mayúsculas, pero con las palabras “sangrienta” y “jamás” subrayadas). Entre tantos términos grandilocuentes, faltaba uno fundamental en el cartel de su estreno, “estafa”. no diera lo que prometía en su título, lo cual, y entre otros epítetos, habría significado un delito. El caso de esta película realizada en Argentina, poco conocida y aún menos vista, es uno de los ejemplos más chapuceros de sensacionalismo que ha dejado este oficio. Porque, al final, lo verdaderamente interesante es lo que sucedió detrás de las cámaras y no tanto delante de ellas.
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos