Tan sólo una palabra

ice nuestra chica de portada, la actriz argentina Valentina Zenere, que la autoestima suele hacerle la cobra. Y que cuando eso pasa, ni un físico envidiable como el suyo, ni una carrera repleta de éxitos internacionales ni sus nueve millones de seguidores son capaces de sostenerla. Hay momentos en que no le queda más remedio que salir a buscar su amor propio, que a saber por qué tiene la manía de fugarse cuando más se le necesita. También dice que la última vez que lo sintió cerca fue cuando el productor de –la serie de Netflix en la que ella participa–aplaudió su trabajo. Y a Valentina aún se le empañan los ojos al contarlo. La magia es así. Llegan unas palabras de aliento de alguien a quien admiras y una, que antes andaba arremolinada consigo misma, siente que se le descorcha el espíritu y le brotan las burbujas de nuevo…