En el centro monumental de Éfeso, una ciudad milenaria en el extremo occidental de Turquía, se encuentra uno de los edificios más emblemáticos y singulares de la cultura grecorromana, conocido como la biblioteca de Celso. El monumento está localizado al sureste de la antigua zona comercial, en una plaza de la que partía la calle Curetes hacia el ala suroriental de la urbe. Su casi perfecto estado de conservación no es sino el resultado de miles de años de abandono, excavación y reconstrucción. Tras ellos se encuentra el último deseo de uno de los habitantes más insignes de Éfeso a principios del siglo ii d. C.
Según versa la inscripción principal, el monumento fue donado por Tiberio Julio Celso Polemaeno. Celso fue un miembro del Senado romano con una rica