TECNOLOGÍA OVNI EN EL ÁREA 51
Después de la Segunda Guerra Mundial, la contratación y la protección por parte del Gobierno estadounidense de científicos nazis se basó en la premisa de que estos científicos eran los mejores del mundo y que su información era necesaria para hacer avanzar la ciencia, así como para ganar la guerra contra la URSS. Al hacerlo así, EE UU hizo un pacto con el diablo. Aproximadamente seiscientos millones de páginas de información sobre el uso que hizo el Gobierno de la posguerra del conocimiento de criminales nazis sigue siendo información clasificada. Muchos documentos sobre el Área 51 están en esta colección.
La razón por la cual el Gobierno Federal no reconocerá oficialmente que el Área 51 existe no se debe a los aviones espía, los bombarderos sigilosos o los drones que tanto ahora como antes se ensayan allí. La razón es muy distinta. Es por un programa emprendido por cinco ingenieros del Área 51. Este programa tenía que ver con los restos del accidente de un platillo volante en Roswell y fue anterior al desarrollo de las instalaciones originales de la CIA, actualmente llamadas Área 51, construidas por Richard Bissell en 1955. El Área 51 se denomina de este modo no porque fue un cuadrante elegido al azar, como se ha dicho en tantas ocasiones, sino porque los restos del accidente de 1947 en Roswell, Nuevo México, fueron enviados desde la base de la Fuerza Aérea de Wrigt-Patterson a un lugar secreto del desierto en Nevada, precisamente en el año 1951.
La nave que se estrelló en Nuevo México en 1947, cuyo mito se ha dado a conocer como el «incidente de Roswell», ocurrió muchas décadas antes de la publicación de este libro. Todos los que estuvieron directamente implicados en ese incidente —y que actuaron en nombre del Gobierno—han fallecido. Al igual que en el Área 51, el Gobierno de EE UU se niega a admitir que el incidente de Roswell tuvo lugar, pero lo cierto es que sí sucedió, según el testimonio importante de un hombre entrevistado en el transcurso de dieciocho meses para este libro. Participó en el proyecto de ingeniería que surgió a partir del incidente de Roswell, él fue uno de los ingenieros de élite de la EG&G que trabajaba en el insidioso problema de ingeniería original del Área 51.
INGENIERÍA INVERSA
En julio de 1947, el
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