DE SEX SYMBOL A INVENTORA HEDY LAMARR
Hedwig Eva Maria Kiesler nació el 9 de noviembre de 1914 en Viena, Austria. Su madre, Gertrud Kiesle, fue una bella y brillante pianista nacida en Budapest y de la alta burguesía judía. Su padre Emil Kiesler, también judío, era de Ucrania, pero completó su educación en Rusia y emprendió un futuro exitoso en la banca en Viena.
Al ser hija única, Hedy fue muy mimada y se crió en un lujoso hogar. Su papá le inculcó el deporte y la música, y, como la adoraba, solía llevarla de viaje al lago de Ginebra, a los Alpes suizos, a Roma y a París. Pero él y su madre también llevaban una intensa vida social en Viena, por lo que rara vez estaban en casa con ella por las noches.
Aunque Hedy era rebelde, destacaba por su inteligencia y era una alumna superdotada; le gustaba leer y actuar, y su madre le daba clases de piano. De igual manera, siempre fue bella y, a los 14 años, los jóvenes se enamoraban locamente de ella. Según el biógrafo Stephen Michael Shearer, autor de Beautiful: The, era tan bonita, que un empleado de la familia intentó abusar sexualmente de ella y la segunda vez lo logró. Hedy se lo ocultó a sus padres.
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos