Es de mañana en el desierto. El astronauta se prepara para el vuelo. El equipo de tierra está listo y las familias se unen a los inversores para presenciar el logro histórico: un viaje a la frontera del espacio, la llamada Línea Kármán, a bordo de una nave espacial privada. La nave espacial despega acoplada a un avión de lanzamiento, que realiza un ascenso hasta los 47.000 pies, donde se produce la orden de liberación: “Release, release, release!”. Una vez desconectado, el avión de lanzamiento vuelve a la pista para su aterrizaje mientras la nave espacial acelera a Mach 3 y apunta su nariz hacia arriba en un ascenso casi vertical con ganancia de altitud vertiginosa, impulsado por su motor cohete híbrido, que utiliza tanto combustible sólido como líquido para generar 16.500 libras de fuerza (73,5 kilonewtons) de potencia. La quema de combustible del motor dura 76 segundos y la frontera del espacio se aproxima. El piloto apaga el motor del cohete a unos 180.000 pies (54.864 metros) y la nave espacial entra en una trayectoria balística hacia su apogeo de 328.491 pies (100.124 metros). Después de experimentar la microgravedad durante unos tres minutos, el tripulante hace la reconfiguración aerodinámica necesaria para el descenso y, durante los siguientes 20 minutos, dirige la nave hasta un aterrizaje de planeo seguro.
Así podría describirse el vuelo espacial realizado por Virgin Galactic el 11 de julio de 2021, durante el cual su fundador, Sir Richard Branson, experimentó la microgravedad por primera vez. Pero no se equivoquen: el relato anterior es del 21 de junio de 2004, cuando Mike Melville llevó la SpaceShipOne a 100 kilómetros de altura, convirtiéndose en el primer astronauta comercial de la historia.
BURT RUTAN
Cualquier similitud entre estos dos vuelos no es mera coincidencia El vuelo Unity 22, el vigésimo segundo de SpaceshipTwo Unity (éste de 2021), sólo se produjo porque el proyecto se estructuró sobre los hombros de un gigante: Burt Rutan, fundador de Scaled Composites y creador del proyecto SpaceShip. A lo largo de su carrera, Rutan proyectó varios aviones, como el VariEze, el Boomerang, el Proteus y el Voyager, por nombrar sólo algunos. Las denominadas configuraciones no convencionales son la marca registrada de Rutan, considerado uno de los mayores entusiastas de las configuraciones canard (que presuponen alas delanteras). Burt también fue pionero en el uso de materiales compuestos en la aviación general, inspirado en los ágiles métodos de fabricación que ya se empleaban en la industria naval; no por casualidad, en 1982 bautizó su empresa como Scaled Composites.
Las primeras ideas sobre la configuración y el funcionamiento de la SpaceShip comenzaron a formarse en la imaginación de Burt ya en 1994,
