Locos por el Countach
Aug 26, 2021
3 minutos
Richard sufría al conducirlo, pero lo amaba igual, así que decidió colgarlo de un muro de su casa para verlo cada mañana
con pasión, por pura fascinación irracional. Puede que al sentarte en él la puerta toque con tu cabeza, que arranque cuando quiera o que cada vez que lo uses salgas empapado en sudor. Pero es así, como una mujer bellísima y fatal. Los locos por los Countach somos legión y cada uno lo vive a su manera. Richard Moriarty, por ejemplo, sufría al conducirlo, pero lo amaba
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