Los FANTÁSTICOS 4
PARA EL DÍA 23 DE JULIO, cuando se declaren oficialmente inaugurados los Juegos Olímpicos de Tokio, habrán pasado 1,798 días desde que se apagó el pebetero en el estadio Maracaná de Río de Janeiro, en el ya lejano 2016. Si nos aferramos al lapso que marca el fin de una edición de los Juegos Olímpicos y el comienzo de la siguiente, la última vez que una olimpiada duró más de cuatro años fue a mediados del siglo XX.
La espera ha sido dura para cientos de millones de aficionados alrededor del mundo, y aún más la padecen quienes dedican buena parte de sus vidas a prepararse y representar a su, para los atletas de alto rendimiento este proceso fue mucho más complejo. Durante meses las instalaciones que requieren para entrenar permanecieron cerradas; el contacto directo con sus compañeros y entrenadores se suspendió; la mayoría de las competencias clasificatorias se cancelaron o pospusieron… Un ciclo olímpico distinto a cualquier otro. Pero, a fin de cuentas, lo lograron: nuestros representantes están listos para defender sus colores.
