Un exceso de luz azul también puede dañar su piel
Algunos estudios ya habían demostrado que la luz azul daña la retina y aumenta el riesgo de degeneración macular asociada a la edad (DMAE). Pero ahora un nuevo estudio alerta de que este tipo de luz, que abarca una longitud de onda de entre los 380 y los 500 nanómetros, también afecta a la salud de la piel. La explicación está en que la constante exposición a esta radiación acaba alterando la síntesis de algunas proteínas de la piel, lo que deteriora la barrera cutánea y produce estrés oxidativo. Como consecuencia la dermis envejece con más rapidez y se produce una mayor pigmentación, pudiendo aparecer manchas.
Los investigadores señalan que el límite