Mi vida después de masturbarme todas las mañanas durante un mes

rutina, hace no mucho, se había vuelto una tortura, los niveles de estrés se encontraban al máximo, ya no recordaba que tenía un clítoris dentro de mí. La situación se puso tensa. Tengo tres trabajos y mi mente se mantiene ocupada todo el día. Mis empleos van desde los más normales hasta el cuidado de un perro enfermo, podría sonar fácil pero me agota más que los otros dos. Y volvamos a las palabras del inicio, node entretenimiento me mantenían despierta; no, no estoy exagerando, así es mi vida. Así que decidí hacerle caso a esa dulce voz que me sugirió tal consejo y tuve ese “autoplacer” que podría darme más energía y menos angustia. Es algo que vale la pena, amigas, lo recomiendo completamente.