NUEVO AEROPUERTO DE TURQUÍA: Competitividad económica y turística
Su diseño, tamaño y alcance es espectacular. La meta: convertir al país en un hub logístico y comercial que sea puente económico para las siguientes generaciones. Se trata de un proyecto que constará de cuatro fases que se espera, culminarán en 2028, cuando concluyan las seis pistas y las dos terminales, que ocuparán un gigantesco espacio de 80 millones de metros cuadrados (m2 ).
Turquía, que tiene un nivel socioeconómico similar a México, apostó por los grandes proyectos de infraestructura para detonar el desarrollo de ese país y va en buen camino.
El proyecto cuenta con un sistema de vigilancia con miles de cámaras de seguridad, infrarrojos y sensores de fibra óptica. Las primeras dos pistas de aterrizaje son de 3,750 y de 4,100 metros de largo, respectivamente; una torre de control de tráfico aéreo, y diversos edificios de servicio para pasajeros. Incluye el área comercial dutyfree más grande del mundo, de 53,000 m2 destinados a diversas tiendas comerciales.
En conjunto, la terminal aérea contará con una capacidad para operar 500 aviones simultáneamente, mientras que en su espacio de aparcamiento techado y a cielo abierto, se podrán estacionar hasta 70,000 automóviles, vigilados por 9,000 cámaras con capacidad de lectura para leer cada placa, con reconocimiento facial adicional.
ARQUITECTURA INTEGRADORA
Los interiores han sido diseñados para reflejar las culturas turca e islámica, incluyendo mezquitas, baños, cúpulas y estructuras históricas. La firma IGA (Istanbul Grand Airport), administradora del proyecto, indicó que la visión es acoger a 90 millones de pasajeros en 2019; 150 en 2023,
