Glass
En el año 2000 dos visiones radicalmente distintas del cine de superhéroes llegaron a la carterla: X-Men, una adaptación de los cómics de mutantes de la editorial Marvel, y El protegido, un relato en clave de intriga casi hitchcockiana particularmente inquietante y truculenta, narrada en tono casi intimista en torno al único superviviente de un accidente ferroviario interpretado por Bruce Willis, El protegido.
Desde ese origen, estrenada en 2016, M. Night Shyamalan ha contado con un presupuesto de 20 millones de dólares para poner en pantalla lo que para algunos es el cierre de una trilogía y para otros la secuela de dos películas bastante distintas, aunque en cualquier caso es la nueva pieza de una franquicia superheroica creada casi por sorpresa en este largometraje. Se recupera al personaje de Willis, David Dunn, cuya historia como héroe apenas acababa de empezar cuando concluyó . Y no vuelve solo. Le acompaña su némesis, el Señor Cristal, alias de supervillano de Elijah Price, personaje interpretado por Samuel L. Jackson. Ambos tendrán que medirse ahora con Kevin Wendell Crumb, el personaje de McAvoy, especialmente con su temible personalidad como la Bestia.
