En aquellos años cuando la luz no llegaba a muchos pueblos, eran incontables las historias que se mencionaban al ocultarse el sol, Hay quienes dicen que, por las noches, todavía cabalga el charro negro, la leyenda dice que cuando el sol comienza a esconderse, y todos se preparan para dormir, una entidad maligna, camina por los caminos y veredas, en el trayecto de la noche, se escucha el fuerte galopar de un majestuoso caballo negro azabache con penetrantes ojos tan rojos como carbones encendidos, su jinete, un hombre alto e imponente que está vestido con el tradicional traje de charro, adornado con botones de plata fina, y espuelas de oro puro.