Carta de NavidadLa Navidad es la más hermosa época, porque ésta nos trae a los seres más queridos, a aquellos que viven en un cielo, tan distinto para todos como cercano. El que cobija a un pueblo, una casa, o una mesa, donde esa silla o ese sillón que tu sabes, lo ocupa ya otra persona, y que cuando tocas su madera, su tela o su asiento, sientes todavía el calor que antaño dejara la persona que más quisiste.Un abrazo para ellos, para el que tiene en su corazón el sentimiento más puro y el recuerdo más sincero. Para el que perdió a un padre, a un hermano, a un abuelo, Un abrazo al amigo que recuerda al compañero, y al que mira destrozado aquella silla vacía recordando con dolor la nochebuena pasada, en que su madre sufría lo poco que le quedaba.Al que luchó por estar y lo consiguió , al que nos dio una lección y ha llenado de regalos el árbol...solamente con su presencia.Y levemente recuerdas el calor de aquella chimenea y el olor de su lumbre y de su leña, los dulces de la abuela y el aguinaldo bajo mesa, aquellas pesetas que tan bien te servirían para comprarte un capricho o pa llenar la nevera pa comer a mediodíaLa bandeja de mazapán, de alfajores y de ese polvorón que tu madre decía ser su preferido, para dejarnos el resto, como si no hubiera tenido bastante con darnos la vida.No hay pueblo que no se luzca, y se engalané de brillo, de luces y del humo del carbón del castañero. De la sonrisa perenne con la bufanda en el cuello de ese niño que recoge en el suelo caramelosDel villancico solidario en una esquina sin más fin que unas monedas pa el pobre, mientras la gente disfruta como cuando eran pequeños, al abrigo de la sonrisa de un niño. Son ellos, sin lugar a duda, los que tiran de nosotros y del mundo entero.No hay paseo como el de estas tardes, el paseo más bonito del año.Las mismas calles, la misma gente, y una luz que se te antoja como el recuerdo que aun vive en tu interior y despoja en cada brillo una página de tu vida.Respiras en el invierno, el aliento del pasado, una esperanza mordida, un repicar de campanasen que ahora al recordarlo parece solo un momentoEl mismo que un suspiro dura cuando ves a tu hijo correr por el mercado navideñoEntre los puestos repletos de serrín y de figuras, y esa estrella tan brillante que corona el nacimiento. La Navidad es el momento en que se abren los altillos y se llena de color y de alegría el más triste de los hogares. Un soplo de esperanza en mitad de tanta ruina con el olor de la castaña, del serrín y del abeto.La otra Navidad, de la que me hablara mi abuelo, la de los años 40, sin regalos, ni dinero, con unas migas por cena y una vieja guitarra que guardaba en el ropero. Esa otra Navidad, tan material como un beso.Pero no mires atrás , la vida es lo que pasa mientras vives de recuerdos, mientras esperas a que todo vaya mejor, sin saber que no hay nada mejor que la vida. Recuerda el día de mañana, cómo viviste su cara con los ojitos cerrados disfrutando del sueño y ya vendrán otras luces, otras cenas y otros dulces.Disfruta de este momento, no será igual la próxima Navidad.Porque, como decíamos...En enero, el humo de las castañas se irá con el frío y con él el abrigo y la noche; vendrán las lluvias despertando, antes de tiempo, y en la más santa de las semanas ya nadie se acordará de la mula, o del abeto. Si esta fuera la última noche, sí el mañana no tuviera mañana, ni noche ni nacimiento, no esperes a Navidad para decirle te quiero,.Abrázala cada noche como si no hubiera más regalo en el mundo que la suerte que estás viviendo, Duerme al calor de su pecho. Como cuando pequeños, abrázalo con dulzura, como si cada noche fuera la última, y el despertar año nuevo.Éste es el capítulo 66 de Podcastinitis.He...