La Dra. Aideé Gibraltar Conde, médico especialista en medicina de rehabilitación, adscrita a la Unidad Médica de Alta Especialidad “Dr. Victorio de la Fuente Narváez” del Hospital de Traumatología, Ortopedia y Rehabilitación, en la Unidad de Medicina Física y Rehabilitación Norte, IMSS en la Ciudad de México, México, nos comparte su experiencia sobre la importancia del cuidado articular en el paciente con hemofilia.
El tratamiento integral de las personas con hemofilia, especialmente las que tienen un tipo grave, requiere de un equipo multidisciplinario especializado. En las guías publicadas en el 2020, la Federación Mundial de Hemofilia prioriza los objetivos para poder otorgar salud y mejor calidad de vida a estos pacientes.
El tratamiento de las hemorragias musculoesqueléticas en forma aguda se resume en dos pasos: el primero, consiste en hacer un reemplazo del factor deficiente, y el segundo se simplifica con el acrónimo PRICE (por sus siglas en inglés), donde la P corresponde a protección del área afectada, la R al reposo de esa articulación, la I es aplicación de hielo el día que inicia la hemartrosis durante 15 minutos cada 2 horas, la C corresponde a la compresión con un vendaje elástico y la E es elevar el segmento afectado. El tratamiento del dolor agudo y crónico se puede dar bajo la prescripción de paracetamol e inhibidores de la COX-2 y, en caso de dolores más intensos, incluir opioides. Esta terapia deberá complementarse con psicoterapia, terapia manual y meditación.
Finalmente, la Dra. Gibraltar concluye que en rehabilitación hay diferentes estrategias terapéuticas a través de medios físicos para ayudar a disminuir el dolor, los cuales van encaminados a mejorar el movimiento, la flexibilidad, la fuerza muscular, el entrenamiento propioceptivo y el balance, por medio de la actividad y el entrenamiento físico. La elección de esas actividades dependerá de las preferencias del paciente y su condición física, así como de los recursos disponibles.
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