Entre la normativa que la UCI ha aprobado recientemente, han habido puntos menos importantes pero muy mediáticos y al revés.
Que una gran vuelta pueda contar con 23 equipos es por ejemplo una excelente decisión que abre la puerta, seguramente, a hacer viable la supervivencia de tres estructuras de ciclismo, con la generación de puestos trabajo que ello genera.
Lo mismo decir de la opción que surge para poner más corredores por equipo en otras carreras.
Sin embargo de las novedades que la UCI presenta muchos nos quedamos con la prohibición de dos posiciones, la del "bicho bola" y la de acoplarse al manillar con los brazos sobre la barra, como lo más reseñable que la UCI ha sacado a la luz pública.
Y es que como comentamos con Jorge Quintana, periodista y socio de la empresa de servicios al ciclismo VeloFutur, pero sobretodo muy conocedor de los entresijos del negocio, la UCI se vende muy mal, y para muestra el ruido que ha tenido una decisión menos buena frente a dos que son muy buenas.
Por cierto, que como bonus track nos anuncia importantes novedades sobre la WADA y el uso de los corticoides en el deporte gracias a la postura que el ciclismo ha adoptado frente a esta sustancia.
Así lo vemos desde www.joanseguidor.com