Un herbario, según la RAE, es una colección de plantas secas y clasificadas, usada como material para el estudio de la botánica, pero aquí traemos un herbario que es una caricia y un paseo, un herbario que es un verso eterno, un herbario que es un bosque en el cielo, un herbario que es una poeta.
Emily Dickinson es un herbario, es un misterio, es una escritora norteamericana del siglo xix (nació en 1830), cuyos poemas son fundamentales en el desarrollo de la literatura universal. Vivió toda su vida en Amherst (Massachusetts) y apenas salió de la casa familiar para visitas fugaces en ciudades cercanas (Washington, Boston o Filadelfia). Estudió botánica, historia natural y astronomía en el seminario para mujeres Mount Holyoke, lugar en el que constató la opresión de ciertos corsés morales. La fundadora de la escuela, Mary Lyon, era una gran botánica que animaba a las niñas a recoger, estudiar y coleccionar flores y plantas locales preservándolas en un herbario. Abandonó este seminario