cinco días por la región francesa de Occitania es siempre un plan potencialmente excitante. La belleza de sus paisajes, sus pueblos –algunos de ellos considerados de los más bonitos del país vecino–, su buena gastronomía o sus grandes yde abril y por carreteras secundarias escénicas por la campiña francesa. Poco tráfico, buen tiempo y sonidos a V8 y V12 poniendo melodía a unos paisajes de ensueño… Qué más se puede pedir. Por no hablar de la interesante experiencia gastronómica en la que hemos conocido algunos de los mejores restaurantes de la región, con las especialidades locales como protagonistas. Por otro lado, también hemos tenido la oportunidad de hacer visitas culturales de gran interés, como la que nos ha llevado a las cuevas de Roquefort, donde se produce el queso con la misma denominación. O la majestuosa Abadía de Fontfroide, una de las abadías cistercienses más importantes y bien conservadas de Francia. Conducción, gastronomía, cultura… Buen combo sin duda. Y para acabar cada jornada, naturalmente, nos alojamos en señoriales castillos, en cuyos jardines los Bentley parecían un elemento más de decoración, formando una estampa sencillamente única. Entre estos elementos han pasado estos días, una especie de sueño que ha sido muy real, una extensión del carácter intrínseco de Bentley convertido en viaje. Exquisitez absoluta al servicio de los propietarios de la marca. Creo que habrá que empezar a pensar en comprar uno para disfrutar de estas experiencias más a menudo.
Un viaje para soñar
May 02, 2024
1 minuto
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos