SANTA MARÍA COYOMEAPAN, Pue.– En los dos años y cuatro meses que duró su gestión como alcalde, Rodolfo García López, del Partido del Trabajo (PT) y cuya familia mantiene su cacicazgo en el municipio, gastó el presupuesto superior a 260 millones de pesos de la demarcación nahua, una de las más pobres del país, sin ejercer el cargo y dejando a la población inmersa en una crisis política y social.
El 23 de febrero último, cuando faltaban menos de ocho meses para que concluyera su periodo, García López –esposo de la diputada federal Araceli Celestino, también del PT– solicitó licencia para separarse de un cargo que no ejerció, pues, según los habitantes, todo ese tiempo radicó en la ciudad de Tehuacán y apenas fue de manera esporádica a cuatro de las 44 localidades que conforman Coyomeapan.
Esta situación prevaleció desde el arranque de su trienio, el 15 de octubre de 2021, cuando el ahora exedil tuvo que rendir protesta en el vecino municipio de Ajalpan –a más de hora y media de Coyomeapan– y desde entonces no pudo ingresar a la mayor parte del territorio, donde se supone fungía como presidente municipal, debido a que los pobladores que se oponen a él y a su familia montaron filtros en los accesos carreteros para impedirle el paso.
No obstante, el ayuntamiento, encabezado por García López, recibió las partidas presupuestales que correspondían al municipio y emitió informes en