ANTES DE SENTARME CON CAROL BURNETT en el hotel The Peninsula de Beverly Hills, su ayudante me pidió que le enviara una foto de una prueba de covid negativa. Esto sería una cortesía para hacer cualquier entrevista, pero es que la artista estaba teniendo un mes especialmente importante y no quería estropearlo poniéndose enferma.
Mi test de covid ha dado negativo y me encuentro bien, pero cuando llego a la suite no quiero estrechar la mano de Burnett, ni siquiera cuando me saluda con su deslumbrante sonrisa característica. Ya puedo ver el titular: «Una idiota contagia con peligrosos gérmenes a la legendaria Carol Burnett».
¿He mencionado que Carol Burnett tiene 90 años?
Tengo muchas
