Jugar a los últimos lanzamientos, sin necesidad de pasar por la nube y con un PC del lustro pasado… ¿qué tal suena la idea? Con avances como la generación de imágenes intercaladas, el escalado inteligente y otras que están por llegar, es ya una realidad; no es un sueño, aunque lo parezca. Términos como AMD FSR, NVIDIA DLSS o Intel XeSS, junto a otras tecnologías, son los culpables de todo ello.
A la hora de actualizar el ordenador, para muchos, uno de los motivos principales de hacerlo son los videojuegos. Esto ha sido así desde que los PC empezaron a exigir más y más, con títulos como Wolfenstein 3D, Alone in the Dark y la popular frase: ¿es capaz de mover Crysis? Esto último, hace referencia a un juego que, durante años, dio muchos quebraderos de cabeza a la hora de encontrar un hardware que le hiciera justicia.
La adopción, por parte de Microsoft y Sony, de componentes muy similares a los de un ordenador doméstico parece haber ayudado a que las cosas cambien. También, que una marca se haya convertido en el principal. Al menos, en cuanto a su capacidad para que funcionen los títulos actuales más exigentes.
