Resiliente y gozador de la naturaleza. Máximo Menem (20) se enfrenta a la vida de manera optimista. No tiene miedo a estar en el ojo público y está sumamente tranquilo para continuar disfrutando de lo que más le gusta: sus estudios en arquitectura, el deporte y su tiempo libre con amigos y familia. Su madre, Cecilia Bolocco, tiene un rol fundamental. Le inculcó como lema de vida “pensamiento y acción” -“siempre me dice: ‘si se te viene algo a la cabeza, hazlo y sé perseverante; así vas a lograr todos tus objetivos’”, comenta-, y es quien lo impulsa a “dejar todo lo malo de lado, seguir adelante con mi verdad interior y estar tranquilo conmigo mismo”.
Muchas veces se le dio la posibilidad de vivir fuera de Chile. Sin