APRINCIPIOS DE 1970, JAPÓN ESTABA DESPEGANDO. Los gráficos que marcaban el progreso de la economía apuntaban tan alto que algún despistado podría pensar que se trataba de la trayectoria que seguía el Oshumi, el primero de los satélites que el reino nipón puso en órbita.
El optimismo llegaba también a través de grandes eventos, como los Juegos Olímpicos de Tokio en 1964 o la Exposición Universal de Osaka en 1970. El país donde nace el sol, que es eso lo que significa Nippon (o Nihon), disfrutaba de un maravilloso amanecer después