PUEBLA, Pue.- En lo que resta de 2023, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) se propone lograr una tarea que suena imposible y que no hizo en seis años: concluir con la reconstrucción de bienes patrimoniales y culturales, inmuebles y muebles, que resultaron dañados por los sismos del 7 y el 19 de septiembre de 2017.
El 12 de mayo, en un acto realizado en Izúcar de Matamoros, Diego Prieto, titular del INAH, reveló que en la víspera el presidente Andrés Manuel López Obrador instruyó terminar este año con las obras de restauración pendientes.
La tarea, explicó, será coordinada a nivel nacional por la Secretaría de Cultura (SC), Alejandra Frausto, y, en el caso de Puebla, un total de 154 obras de las 187 que faltan serán ejecutadas por el gobierno de Salomón Céspedes Peregrina, mientras que el resto las llevará a cabo el INAH en coordinación con áreas de la SC.
“Va a ser una tarea complicada –reconoció Prieto–, pero tenemos ya las bases, tenemos el planteamiento y los calendarios para poder atender estos templos y conventos”.
Céspedes, por su parte, se comprometió a “no fallarle” al presidente, quien busca cerrar su sexenio con esa promesa cumplida. En 2019, el mandatario López Obrador aseguró que para 2020 se concluiría con el programa de reconstrucción de los daños causados por los sismos, lo cual no ocurrió. Luego, en diciembre de 2021, al entregar el Premio Nacional de Ingeniería,