Con más de veinte años de experiencia en el mercado de las herencias, Pedro Fernández ha creado un grupo empresarial, el Grupo Hereda. Se aglutinan en él distintas firmas, incluido un fondo de inversión del que tiene una parte, pero el foco siempre es el mismo: cazar herencias sin reclamar y entregárselas a sus legítimos herederos, muchas veces desconocedores de que lo son.
Puede que a algunos les genere desconfianza pero si hay algo en lo que Fernández insiste en subrayar es en la transparencia y honestidad de un negocio que no requiere de bolitas ni cubiletes porque, de lo primero que advierten, es que de esa herencia de 10, pongamos por caso, tú te vas a llevar siete y ellos tres. Y como el pago es a éxito, antes de asumir una investigación se aseguran de que hay dinero detrás: “Si nosotros vemos que no hay nada, yo no voy a trabajar porque no te cobro nada”. Así de sencillo.
Pero como detrás de cada herencia hay también una historia, a veces de lo que conduce el periodista y que se nutre de los casos que le proporcionan en el Grupo Hereda.