Tras el fallecimiento de Isabel II (1926-2022) el pasado mes de septiembre de 2022, ascendía al trono de Inglaterra el, hasta entonces, príncipe Carlos de Gales (1948). Granjeándose muchas menos simpatías entre el gran público que la “reina madre”, Carlos de Inglaterra se ha manifestado públicamente como un firme defensor de las llamadas “terapias alternativas”. Su primer discurso, en diciembre de 1982, ante la Asociación Médica Británica, desencadenaría una enorme indignación entre la clase médica y científica, al considerar que el príncipe Carlos estaba realizando una apología de la superstición.
EL GURÚ DEL REY CARLOS
Como todo entusiasta del Ocultismo, el príncipe Carlos también tuvo su gurú: se trataba de sir Laurens van der Post (1906-1996), un excéntrico personaje, nacido en el seno de una muy acomodada familia de origen holandés, pero criado en Sudáfrica. Presentado como escritor, antropólogo, periodista, aventurero y conservacionista de la Naturaleza, supo edulcorar su autobiografía, como antaño lo hiciera el mítico Barón de Münchhausen (1720-1797), exagerando sus aventuras como explorador de regiones selváticas, así como sus pretendidas gestas como héroe de guerra durante la II Guerra Mundial.
En la Sudáfrica de la época, Van der Post tuvo el valor de manifestarse combativo contra las políticas de apartheid o segregación racial, denunciando que la educación recibida en el colegio durante su infancia, ya quisiera destruir en él el sentimiento de humanidad que le unía con los negros, tal y como relataría en su libro (1955). Una