LA FAMILIA DE TONY HSIEH HABÍA IDO Y VENIDO PARA CUANDO EL CEO DE ZAPPOS, DE 46 AÑOS, COMPRÓ UN RANCHO EN PARK CITY, UTAH.
Después de un episodio maníaco y de una posterior internación en el hospital, en junio de 2020, sus padres habían llegado a la ciudad con sus dos hermanos, Dave y Andy. A pesar de la visita, Tony pasó poco tiempo con ellos y les pidió a sus amigos que se aseguraran de que nunca se quedara a solas con ellos.
En los momentos que Hsieh pasó con su familia, les resultó difícil conectarse con él. Durante un encuentro con su madre, Judy, dijo que sería sincero con ella si actuaba como su amiga. Si actuaba como un miembro de la familia, le escondería información. Después de que Judy le sugirió que viera a un terapeuta, Hsieh le respondió que lo haría, pero solo si durante todo el tiempo que estuviera en sesión ella se sentaba en una bañera con hielo. Cuando volvió a presionarlo con el tema de la terapia, mencionando sus problemas de atención, Tony abandonó la casa hecho una furia.
Cuando llegó el momento de que la familia partiera, Andy lo pensó dos veces. Pese a la distancia que los había separado a lo largo de los años, ver a un montón de gente nueva que no había conocido antes lo llevó a quedarse en Park City y vigilar a su hermano mayor. Diez días más tarde, volvió y se dio cuenta enseguida de que había ingresado en un ecosistema donde la gente competía por el dinero de Tony,
