oco queda de Toni en él: el hijo mayor de los Alcántara que interpretaba en la serie de televisión . Con una carrera como actor más que consolidada y cuatro libros a sus espaldas, Pablo Rivero (Madrid, 1980) nos habla de su última novela, . Creo que el género me ha elegido a mí desde que era muy pequeño. gira en torno a lo que no conocemos, lo misterioso, la cara oculta del ser humano y el terror. Desde pequeño me ha llamado mucho la atención la psicología, me daban terror las películas de miedo, los asesinos en serie…; pero, más adelante, influenciado por mi faceta como actor, me ha interesado saber qué sucede en la mente humana para que alguien pueda cometer crímenes tan atroces. Por otro lado, la novela negra te permite hablar de temas muy importantes sin aburrir. Mujeres y hombres. Por desgracia, es un tema que está muy presente en nuestra sociedad. Se tiene pareja cada vez más tarde y cuando se quiere tener hijos, muchas veces, cuesta. Vivimos en una sociedad con la suficiente información para saber de esta problemática y, sin embargo, existe una gran presión social y muy poca sensibilidad. Constantemente escuchamos frases del tipo: "¿Cuándo te animas a tener hijos?". De eso va el libro, de una mujer independiente que tiene idealizado lo que sería un dulce hogar, la familia perfecta. Aunque haya sido libre y feliz sin hijos, es muy difícil luchar contra esos cánones. Soy muy fan de Pierre Lemaitre, Emmanuel Carrère y de Truman Capote. Pero utilizar este recurso realmente fue debido a que realicé una sobre de Dan Brown que hablaba un poco de eso, de intentar dejar al lector con la miel en los labios al final de cada capítulo. Ponerle muy difícil el "cierro el libro y me acuesto". Indudablemente. Un punto fuerte de mis novelas negras es que fusiono dos lenguajes: el que aprendí estudiando Comunicación Audiovisual y Periodismo y el de actor. Cojo la parte de una serie que engancha pero describiendo a los personajes de otra manera. Por otro lado, no intento justificar los personajes pero sí entenderlos. Huyo del malo malo y del bueno bueno. Me gusta explorar los condicionantes del ser humano.
