EN LA ROMA DEL SIGLO I, EXISTÍAN PERIÓDI- COS, LAS ACTA DIURNA, ANUNCIOS EN LAS PAREDES, COMO LOS QUE SE CONSERVAN DE POMPEYA E INCLUSO ALGO PARECIDO A LA RADIO, CON PRAECONES (PREGONEROS) Y GENTE QUE REPETÍA POR LAS CALLES LO QUE ESTOS HABÍAN DICHO. Tele no tenían los romanos (les faltó un poco), pero había una tribuna pública, donde subía cualquiera que quisiera dar un discurso. Se llamaba la rostra y estaba en el Foro de Roma. Similar al speakers’ corner de Hyde Park, en Londres, donde cualquiera puede dar su opinión pública a gritos. Se supone que habría algo parecido en cada ciudad romana. Desde allí hablaban y debatían los candidatos, se daban a conocer propuestas y eran aplaudidos o abucheados, por una audiencia en directo. Según la popularidad de quien fuera a hablar, así tenía más o menos oyentes, o audiencia, palabra sinónima.
EL ORIGEN DE LA PUBLICIDAD
Si existían medios de comunicación y competencia entre distintos comercios y productores, es lógico que allímanera de que tu negocio pudiera intentar ser diferente; hacer que se hable de tu tienda o de tu bar. ¿Cómo lo hacían en la antigua Roma para anunciarse?
