La pareidolia (la palabra viene del griego eidolon, imagen, figura, aparición, y el prefijo para, parecido a, junto a) es un fenómeno que ocurre en el campo de la percepción. El cerebro humano detecta de forma ilusoria imágenes que le son familiares. El ingeniero informático y especialista en neurociencia Jeff Hawkins le dio nombre y lo explicó a través de su teoría memoria-predicción, según la cual el cerebro humano realiza predicciones en base a patrones almacenados en su memoria. Esto supone que, cuando el cerebro recibe imágenes, trata de codificarlas en formatos de información que sean comprensibles para el hombre, y lo hace siguiendo patrones familiares: caras, animales, objetos cotidianos…
«La percepción es un proceso mental de tipo constructivo, debido a que las personas interpretamos activamente los datos que nos llegan a través de los sentidos, por lo que lo que percibimos no es una mera copia de la realidad. Es un proceso complejo que abarca diferentes categorías de fenómenos, y la pareidolia es una modalidad de ilusión que se incluiría en la categoría de las llamadas distorsiones perceptivas», detalla Teresa Paredes, facultativa especialista en Psicología Clínica del Hospital Universitari i Politècnic La Fe de Valencia.
«La pareidolia se podría definir, por lo tanto, como una modalidad de ilusión que consiste en la reconstrucción voluntaria y activa de un estímulo ambiguo o poco estructurado con el