■ Esta práctica recibe distintos nombres: mantra en el hinduismo; dhikr en el sufismo; letanía o jaculatoria en el cristianismo; incluso en la corriente amidista del budismo se contempla la repetición del sagrado nombre de Amitabha, entidad que ayuda a los adeptos en su camino de liberación. Sólo el judaísmo se aparta de esta práctica, pues para él Dios es el “innombrable”.
■ El nombre divino es una energía mística contenida dentro de una estructura de sonido. En efecto, el sonido es vibración, energía con una determinada longitud