Las energías astrales que rigen la personalidad oscilan entre polos, fuerzas que están en tensión y buscan el equilibrio. Esto es aplicable tanto al propio individuo, de lo que nos ocuparemos aquí, como a los acontecimientos externos. No olvidemos que las circunstancias externas e internas están relacionadas, unas llaman a otras de forma misteriosa.
Son esas zonas ocultas que no reconocemos como propias, pero que nos pertenecen, las que dan forma a lo que somos.Tener o no tener, lo bueno o lo malo, conocer o desconocer, el yo y el tú, el amor y el desamor, la salud y la enfermedad, son algunos de esos opuestos.
Si reconocemos lo peor de nosotros y sabremos cómo superarlo –de eso trata esta nota–, entonces, seremos capaces de modificar la realidad.
¿Por qué? Porque comprendernos a nosotros mismos es la llave de la libertad psicológica y porque, una vez libres, seremos dueños del futuro.
ARIES
Aries es un signo de carácter valiente en el que priman su independencia de criterio, su fuerte personalidad, su ambición y ganas de triunfar; pero, a su vez, tiene problemas para