![f066-01](https://article-imgs.scribdassets.com/4lr2w7ya80aaswyl/images/fileH1GTLIE6.jpg)
ESTOY HACIENDO JUSTO LO QUE SIEMPRE ODIÉ CUANDO IBA A DISTINTOS CLUBS EN MI TEMPRANA JUVENTUD: en vez de bailar solo estoy ahí parado, viendo a todos a mi alrededor. Incluso peor: observo lo que usan, veo sus cuerpos moverse, girando por todos lados, tratando de descubrir un estilo cohesivo o las tendencias emergentes. Hay muchas chicas animé, e-boys y e-girls en prendas tecnológicas muy al estilo rave. Hay alguien en la esquina vestido como un plátano, otro como Master Chief de Halo. En cuanto a estilo es un caos, no hay una cohesión obvia. Resulta casi desagradable, hasta causa ansiedad. Pero también se siente cálidamente familiar, nostálgico, como si hubiera regresado en el tiempo a 25 años atrás, a mis fiestas de joven.
Después, la música cambia, el DJ pone una canción tech con un bajo y un tambor que resuenan en las bocinas y la audiencia se vuelve loca. Las paredes visiblemente pulsan al ritmo del bajo y todos en el club cambian de outfit: los colores parpadean con la canción. Por un nanosegundo, la habitación está iluminada y los presentes parecen estar encriptados en un plástico transparente.
Me río asintiendo con aprobación mientras percibo que me he quedado más tiempo del necesario, dudando de mi estancia y sintiéndome como el viejo que ves en cada . Es momento de partir sin pelear para encontrar el camino a través de la pista de baile hacia la salida; solo debo presionar dos botones y estoy fuera, sentado en el estudio de mi casa, viendo la colorida interfaz de VRChat -plataforma que organiza una variedad verificada de mundos virtuales interconectados-antes de quitarme gentilmente el cálido set de plástico de realidad virtual