@Rafaikkonen
os destripes argumentales, o spoilers, para los modernos, son uno de los mayores quebraderos de cabeza del ámbito del ocio en este mundo interconectado en el que vivimos. Es un asunto atemporal que resulta difícil de ponderar, pero lo traigo a colación porque he tenido que lidiar unas cuantas veces con él en, con el reportaje de mejores finales históricos que publicamos en el número 366 de la revista o con el reportaje de de este mismo mes. Esos tres casos inducen una pregunta inevitable: ¿cuándo caducan la confidencialidad o el acuerdo tácito de no revelación de un secreto, una sorpresa o un elemento clave que pueda tener algún producto cultural?