LIBROS PARA San Valentín
EPISTOLARIOS AMOROSOS
CARTAS DE AMOR
Fernando Pessoa
Funambulista, traducción de Isabel Lacruz, 208 pp., 15,50 €
Decir Lisboa es decir Fernando Pessoa, el escritor en lengua portuguesa más importante del siglo XX, pero que publicó en vida un solo libro. La admiración que despierta es unánime; y encaja en la máxima de Octavio Paz cuando afirma que «los poetas no tienen biografía; su obra es su biografía»; en concreto, refiriéndose a Pessoa, dijo que «nada en su vida es sorprendente, nada excepto sus poemas». Con todo, la cincuentena de cartas que aquí se presentaron a la joven Ophélia Queiroz, que entró de mecanógrafa en las oficinas de la Baixa lisboeta donde él ya traducía correspondencia comercial, permiten vislumbrar la personalidad del poeta, el apasionamiento de un enamorado, su ternura, modestia, dignidad, sentido del humor y, sobre todo, la vocación por su obra literaria. De hecho, habla de sus heterónimos, uno de los cuales, Alvaro de Campos, se presenta también ante Ophélia en estas cartas. De él es el poema escrito en 1935, un mes antes de la muerte de Pessoa, a los 47 años, de una cirrosis hepática «Todas las cartas de amor son ridículas».
GRANDES CARTAS DE AMOR
Elizabete Agostinho (ed.)
La Esfera de los Libros, traducción de Paz Pruneda, 192 pp., 16,90 €
Aquí se recogen más de cincuenta cartas de amor de grandes personajes como Napoleón, Mozart o Virginia Woolf. Y es que la mejor prueba de cuánto nos podemos amar está, en muchas ocasiones, en la paciente y concentrada escritura de cartas. Algo que no distingue clases sociales o personalidades, pues se han encontrado cartas de amor firmadas por reyes y esclavos, novelistas y comerciantes, políticos y dictadores. De esta manera, este libro ofrece misivas conmovedoras, exaltadas, apasionadas y sufridas. Fueron escritas por grandes figuras de la historia: aparte de los citados, Beethoven, Karl Marx, la reina … Para , responsable de la recopilación, estas cartas nos enseñan a amar. Nos dan lecciones de dignidad, de pasión, de amorosa resignación. Nos enseñan los caminos de la alegría, del deseo y de la pérdida.
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos