NO ES FÁCIL QUE EN LOS TIEMPOS QUE CORREN llegue a mis manos un coche de pruebas que no tenga ningún tipo de electrificación, pero este Fiat Tipo Cross tiene un espíritu absolutamente modesto (quizá demasiado). ¡Pero por mí, perfecto! Había ganas de conducir un coche así, de combustión pura, con las típicas sensaciones que eso implica y sin ningún tipo de alarde tecnológico.
¿De qué te hablo? Pues por ejemplo de tener que buscar la llave en el bolsillo del pantalón antes de darle al botón de apertura; o tener que girar el contacto para arrancar como se ha hecho siempre.