Amarse tanto
o que ves no existe y, no obstante, te consume. "¿Por qué intentas aferrar, ingenuo, una imagen fugaz?", pregunta Ovidio a Narciso y nos pregunta también a nosotros. Esta imagen es tu punto de gravedad, en torno al cual gravitan todos tus recuerdos, un espejismo de la sociedad del espectáculo? Quizás una forma de atravesar este teatro de sombras sea encontrar el coraje de un verdadero narcisismo. Como abogaba Lou Andreas-Salomé, debemos dejar a Narciso florecer, crear nuestra propia vida y abandonar la impuesta por herencia e inercia.
