El taller de Vicente Grondona es como un laboratorio de formas y texturas. Sus obras son el resultado de una búsqueda estética atravesada por el vértigo del trabajo con materiales no convencionales, resistentes y corrosivos. En sus distintos recorridos, Vicente experimentó tanto la creación solitaria como el quehacer colaborativo con otros artistas, diseñadores y escritores. La resignificación de lo dado, desde una mirada siempre sensible y curiosa, es el modo en que define hoy su práctica. En esta entrevista repasamos sus diferentes etapas y sus pasiones actuales.
L’OFFICIEL: Leí que tus primeros contactos con el arte, en tu infancia, fueron en el taller de tu abuela.
Sí. Siempre pienso que mi fascinación con el arte viene en gran parte de ahí. Ella tenía atrás de su casa un taller. Lo