CARTA EDITORIAL
l cierre de esta edición, acababa de ser anunciado desde la Casa de América en Madrid, España, el ganador del Premio Alfaguara de Novela 2021. La galardonada fue la colombiana Pilar Quintana, por su obra . Esperamos pronto tener en nuestras manos esta son los libros, y el acercamiento con sus autores. Queremos traerte más de estos contenidos, sobre todo porque en la lectura puedes ‘perderte’ y desconectarte un rato de la realidad. A veces es necesario hacerlo, ¿o no? Especialmente, en tiempos ‘complicados’ como estos de pandemia, en los que encontrar salidas creativas y que nos alimenten el alma es muy necesario. Se dice que el hábito de la lectura ha incrementado como consecuencia del COVID-19: a nivel mundial, la lectura de libros y audiolibros es la tercer actividad a la que se le dedica tiempo, superada sólo por el uso de aplicaciones de mensajería y hablar por teléfono, y seguida de las películas y series en . Los libros, sin duda, nos acercan a mundos y experiencias maravillosas. Únete a un club de lectura o lee por tu cuenta; sin embargo, si has abandonado este hábito, nunca es tarde para retomarlo. Justo estoy leyendo , de Edith Eger. Te lo recomiendo. La autora relata su experiencia en los campos de concentración nazi, y resulta revelador descubrir cómo, incluso bajo esas infrahumanas condiciones, los seres humanos somos capaces de encontrarle sentido a la vida y elegir cómo queremos confrontar los hechos que nos suceden en lo cotidiano. El libro es esperanzador, especialmente en estos tiempos de incertidumbre y encierro forzado. Para nada se asemeja lo que hoy vivimos con el terror de aquellos tiempos no tan lejanos, pero es cierto que por momentos esta pandemia resulta abrumadora y desalentadora, desafiante. Dice Eger: “Todos, en algún momento, padeceremos algún tipo de desgracia, calamidad o abuso, provocados por circunstancias, personas o instituciones sobre las que tenemos poco o ningún control. Así es la vida”. Sin embargo, reflexiona la autora, tenemos el poder de decidir aferrarnos o no a esas circunstancias y a desarrollar una mentalidad de víctima: pesimista, atrapada en el pasado y nada saludable. Ningún sufrimiento tiene jerarquías, todos estamos padeciendo esta pandemia desde un lugar único. No minimices tu sufrimiento. Pero actúa. Te invito a encontrar en los libros una posibilidad creativa y extraordinariamente seductora para invertir positivamente tu tiempo de ocio y apapachar tu alma.
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos