2021, el reto de las urnas
Las elecciones de este año representan la prueba más difícil para la 4T y el proyecto que enarbola. Las encuestas colocan al presidente López Obrador con una aceptación mayoritaria en la comunidad. Este dato reiterado todos los días no implica, empero, que esa empatía popular se endose en automático a quienes contiendan bajo el sello de Morena y sus partidos aliados. No es dable decir que no hay signos de peligro para ese proyecto; tampoco, por supuesto, que la inédita alianza de los principales partidos de oposición tiene una victoria asegurada o cercana. Veamos por qué.
Primero. La 4T representa, sin duda, no sólo un cambio de gobierno sino una reforma en transición de régimen que se observa por las adiciones y reformas a la Constitución Política y a diversas leyes. Es natural que esos cambios generen o al presidente de la República.
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos