ESVÁSTICA LOS SIGNIFICADOS DE UN SÍMBOLO A LO LARGO DE LA HISTORIA
VITANGELO MOSCARDA ES EL PROTAGONISTA DE LA CÉLEBRE OBRA DE LUIGI PIRANDELLO: UNO, NESSUNO, CENTOMILA. Es una exploración hacia la identidad del ser humano, una reflexión potente sobre el daño y el malestar que puede ocasionar cuando alguien toma consciencia de sí mismo en un mundo amplio, infinito e ilimitado. Cuando comprende que no es un ser único y solo sino varios –o ninguno– y bien diferentes, siempre en función de los demás, quienes le miran y le someten al yugo de la prisión a conveniencia propia.
Hay algo de todo esto en el símbolo de los símbolos: la esvástica, una especie de cruz con cuatro brazos iguales cuyos extremos se doblan en ángulo recto en la misma dirección. Un emblema que podría parecer neutro, sin fronteras… Sin embargo que cada cual, desde hace miles y miles de años, ha moldeado a su antojo, dándole el significado que más y mejor le convenía en la vida. Una instrumentalización eterna para un no símbolo que, paradójicamente, porta máscaras infinitas, contrapuestas, llenas de soledades sonoras. Por eso, quizás, sea un claro ejemplo de oxímoron. Este bien podría ser el último matiz, ego o significado que lleva a cuestas. Con y sin rigor.
Hay algo de presunción , explica el escritor, historiador y arqueólogo , quien profundiza además en su expansión occidental gracias a la subdivisión de estas arcaicas civilizaciones en diversos pueblos: Galos, Germanos, Latinos o Galatos. apunta desde la experiencia de varios lustros en trabajos de investigación sobre catacumbas cristinas de Roma, donde precisamente hay testimonios del signo, del anagrama, en cientos de lóculos y cubículos.
