Con los pelos de punta
¿Alguna vez has sentido miedo? Si respondes que no, entonces dinos: ¿estás seguro de que estás vivo? Porque no hay nadie que no haya sentido miedo no una sino muchas veces. Escogimos este tema porque estamos en esa época del año cuando podrías toparte por ahí con seres espeluznantes como fantasmas, catrinas, zombis, trolls, esqueIetos, lloronas, brujos y cuaIquier otro personaje de terror que se te ocurra, ya sea por una de nuestras celebraciones tradicionales más importantes -Día de Muertos, con sus calaveritas y altares-, o por una costumbre importada de Inglaterra y Estados Unidos que nos resulta divertida: Halloween, cuando nos disfrazamos -muchas veces un personaje que asuste-para que nos regalen dulces.
Por qué sientes miedo
TE LO VAMOS A RESPONDER RAPIDÍSIMO: PARA SOBREVIVIR.
Imagina que eres un conejo que está feliz en una pradera llena de florecitas lindas y plantas deliciosas. En eso, ves a un lobo que se aproxima, pero tú sigues tranquilamente contemplando el paisaje mientras comes. ¿Qué crees que te pase? Sí: seguramente serás el almuerzo del lobo. En cambio, si sientes miedo, lo más probable es que te eches a correr y, con suerte, evites ese trágico destino.
En tu cerebro, manda una señal al que activa la cual se conecta con para liberar (como adrenalina, cortisol, endorfinas y dopamina), que (lo cual a su vez hace que se te pongan los pelos de punta), (para que veas mejor incluso si la luz no es buena), (para que te enfoques en lo que importa) como la digestión.
