FUNDACIÓN PR ANIMALS EDUCACIÓN COMPASIVA Y ACCIONES SOLIDARIAS CON ANIMALES EN PUERTO RICO
Probablemente la forma más fácil de entender la relación humano-animal sea a través de la relación que tenemos con nuestras mascotas. Al hablar de nuestros animales de compañía reaccionamos sonriendo, nos relajamos y resaltamos todos sus aspectos positivos. Los animales de compañía nos ofrecen un espacio de conexión muy personal e íntimo, que también puede ser muy social. No en vano se trata de una relación con la capacidad de acercarnos los unos a los otros. Por ejemplo, hay más probabilidades de que le hables a alguien en la calle o en el parque si vas acompañado de un perro que si vas solo. Además, sobran testimonios, historias y experiencias de personas que cuentan del efecto positivo y sanador que obtienen a través de este vínculo. Sin embargo, los beneficios que pueden obtenerse de la relación humano-animal apenas se han comenzado a estudiar con seriedad recientemente, así como a reconocer dicho vínculo como algo más que un mero capricho individual.
Aunque recientes, estos estudios han incrementado el reconocimiento y aceptación de que la relación humano-animal produce lazos psicológicos, emocionales y físicos muy importantes, pudiendo enriquecer la calidad de vida de muchas personas. Diversos investigadores así lo indican [1] [2]. Sin embargo, todavía en círculos académicos y científicos se ignora o pone en entredicho la importancia y significado de esta relación. A ello se suma la desconexión de las esferas públicas y gubernamentales a la hora de incluir dicho vínculo como parte de cualquier plataforma de reforma social de la salud y el bienestar.
EL ASPECTO SANADOR DE NUESTRA RELACIÓN CON LOS ANIMALES
Al relacionarnos con nuestras mascotas
