La nueva normalidad trae una nueva movilidad
LA PANDEMIA de la Covid-19 ha traído muchos cambios a nuestras vidas, desde cómo compramos hasta cómo nos movemos, y otros llegarán poco a poco. Un panorama que ya estaba transformándose debido a las diferentes normativas antipolución, desde el límite de emisiones de C02 impuesto desde Europa para los automóviles hasta las restricciones al tráfico en el centro de las ciudades, pero que ahora ha comenzado a acelerarse.
Cuando estrenamos este año también debutó la nueva normativa europea sobre emisiones de dióxido de carbono (CO2) por parte de los fabricantes de automóviles. Esta limita las emisiones de CO2 de los vehículos ligeros y obligará a que su media en la flota comercializada anualmente no sea superior a los 95 gramos por kilómetro recorrido. De momento, las marcas tienen tres años para adaptarse a la nueva legislación, y de no cumplir se exponen a multas millonarias: 95 euros por gramo de exceso y por cada uno de los vehículos matriculados en el Viejo Continente. Según la consultora
