Clint EASTWOOD CUATRO MIRADAS SOBRE UN CLÁSICO
CUN AUTOR DURO DE PELAR, por Daniel Monz—n.
lint Eastwood siempre ha sido Clint Eastwood. Mucho antes de que lo alzaran a los altares con Bird en aquel Cannes de 1988 y que algunos se dieran cuenta de pronto de que se encontraban ante un cineasta importante, Eastwood llevaba ya mucho tiempo siendo Eastwood. De hecho, nunca había sido otra cosa…
Yo me topé con él por primera vez de niño en un cine de reestreno. Por entonces hablaba con la voz rotunda de Constantino Romero y trataba de huir de una mítica prisión de alta seguridad en la estupenda Fuga de Alcatraz de Don Siegel. La película me dejó noqueado. Eastwood era la personificación por excelencia del tipo duro. Sigue siéndolo. Pero con el tiempo pudimos darnos cuenta de que ese tipo duro dejaba entrever por las costuras una removida humanidad que todos sus personajes se esforzaban en contener o disimular. Tipos de una pieza, pero solo en su superficie, porque al rascar aparecían cargados de aristas y complejidades.
Ese ha sido siempre el tipo de personaje que le ha gustado encarnar a Clint, el héroe de apariencia pétrea, pero cargado de tensiones internas que se esfuerza en no dejar aflorar. Personaje que ha ido depurando en una evolución cada vez más sofisticada, desde el icónico ‘Hombre sin Nombre’ de la mítica trilogía de Sergio Leone al crepuscular personaje, revisión de toda su leyenda, que compone en o Su estilo como actor, seco, contenido, basado en el consciente carisma de su hipnótica presencia, lo convierte en un director de actores tan conciso, efectivo y directo como su propia forma de actuar, esto es, que no se anda con zarandajas, que no permite divagaciones del método (que se lo pregunten al pobre DiCaprio en ), y menos aún caprichos ni tonterías; les deja a todos bien claro que han sido elegidos para el papel porque son buenos y que tienen que hacer su trabajo. Así de sencillo. Cuentan con una sola toma, a lo sumo dos, para darlo todo. Y a tenor de los resultados, la cosa funciona.
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos