LA VIOLENCIA DE GÉNERO y la emergencia SANITARIA
Son muchas las distintas violencias a las que nos enfrentamos las mujeres en México, desde comentarios misóginos por parte de algunos gobernantes hasta recortes de presupuesto en cuestiones tan fundamentales para nuestro bienestar, como las estancias infantiles por mencionar solamente algunos, además de las innumerables faltas de respeto, acoso y abuso que vivimos en las calles y, desgraciadamente, también en casa.
Estamos atravesando un momento histórico. Son 199 los países del mundo, según datos de la Organización Mundial de la Salud, que se enfrentan a la pandemia del Covid-19. Y de ellos, también son 199 las naciones donde las mujeres nos encargamos cultural e históricamente de los cuidados de otros y de las casas, según comentó Lorena Rodríguez Bores, secretaria técnica del Consejo Nacional de Salud Mental, el 26 de marzo en una conferencia de prensa –también histórica– en donde se tocó el tema de la importancia de la perspectiva de género en tiempos de crisis. Pero, ¿cómo podemos tener perspectiva de género durante una emergencia sanitaria? Aunque parece ser que a nivel físico el coronavirus afecta menos a las mujeres, hay muchos factores a tomar en cuenta durante y después de la pandemia. A continuación tocamos algunos de ellos. Los datos no mienten: “Cada año se atienden más de 18,000 mujeres, niñas, niños y adolescentes en refugios y centros de atención externa de la Red Nacional de Refugios. El 80% de las mujeres que ingresan a ellos han sido víctimas de violencia dentro de sus casas, lo cual refleja que el hogar no es el lugar más seguro para las mujeres en México”, comenta Wendy Figueroa Morales, directora de la Red Nacional de Refugios. Un país donde reina el trabajo informal, atravesado por la pobreza y en el cual se comenten 10 feminicidios a diario,
