EL VALIOSO PODER DE UNA BOMBILLA
(Madrid) en el año 1942, cuando Francisco Oliva puso la que sería la primera semilla del éxito que hoy, 78 años después y bajo la supervisión de su nieta Raquel, disfruta Oliva Iluminación. Ahora, ella, como vicepresidenta de la compañía, su rutina laboral consiste en supervisar cada mañana todos los proyectos nacionales e internacionales de la empresa, que no son pocos, y lo hace ayudada del sistema Kanban, con el que que controla todas las fases del proyecto: desde los productos necesarios y sus cantidades hasta los tiempos en
