UN MUNDO FEMENINO
a historia de cómo la modelo británica, Jean Shrimpton, llegó a usar lo que parece ser un casco espacial color rosa en la portada de para la edición de abril de 1965, es muy peculiar. En varias ocasiones, numerosas personas involucradas en la sesión (las codirectoras de arte de , Ruth Ansel y Bea Feitler, la editora de moda China Machado e incluso Richard Avedon, quien fotografió la portada) han contado una y otra vez su génesis pero únicamente en pedazos y fragmentos. Dentro de la revista, “el novedoso casco espacial en rosa paradisiaco” es resultado del sombrerero neoyorquino Mr. John, mejor conocido como John P. John, quien hizo los sombreros de Vivien Leigh para . Lo curioso es que la prenda estilo caperuza que Shrimpton estaba usando (y se dice que Avedon odiaba) fue sustitida por una pieza brillante recortada de un pedazo de póster con la forma de casco. Para añadir más intriga al asunto, los parches lenticulares estaban adheridos a un. Lo había concebido como un himno a las olas nacientes de cultura joven y revolución social que estaban derrocando ideas antiguas en la década de los 60. Fotografió a Shrimpton en un verdadero traje espacial de la NASA, el cual Ansel dijo que fue clave en su articulación de ese concepto. “Ver a una mujer en un traje de astronauta era considerada una broma”, le confesó a en el 2009. “Nadie pensaba que las mujeres llegarían a orbitar el planeta. Shrimpton no se veía especialmente preparada para la gravedad cero, pero las chicas eran las musas principales de Avedon, y las estadounidenses tenían grandes ambiciones, aunque éstas seguían siendo descartadas”. Esa noción -de que las mujeres deberían apuntar hacia la luna, literalmente- ha sido encriptada en la esencia de desde su creación. La nueva exhibición, , en el Musée des Arts Décoratifs en París, ofrece una examinación profunda del papel de la revista al documentar y estructurar la historia de la moda. Pero de la misma manera explora la función de como plataforma para las mujeres -muchas de ellas editoras, directoras de arte, escritoras, fotógrafas, artistas, ilustradoras y diseñadoras que han trabajado tras bambalinas para derribar puertas y borrar las fronteras. Ansel, Feitler y Machado lo hicieron. Ansel y Feitler fueron nombradas codirectoras de arte en 1963, cuando ambas eran veinteañeras, y continuaron reformando la estética de la revista con una mezcla cinética de fotografías de alto concepto, ingenio gráfico, astucia periodística y rock ‘n’ roll. Antes de que Machado se convirtiera en la editora de moda de , fue una de las primeras modelos no caucásicas en aparecer en la revista. La edición de abril de 1965 es ahora considerada un artículo de colección; las copias con el ojo parpadeante son extremadamente raras. Cuando se fundó , en 1867, a las mujeres no se les permitía votar en elecciones federales en Estados Unidos (y no se les otorgaría como derecho constitucional hasta 53 años después, con la aprobación de la Enmienda XIX en 1920). Estamos viviendo un momento donde los problemas como igualdad de salarios, seguridad en la educación y oportunidades profesionales para las mujeres siguen necesitando de defensa y activismo extremo. Y por eso, bajo el mando de su primera directora editorial, Mary Louise Booth (una autora, sufragista y traductora de textos antiesclavistas, quien también fue una de las primeras reporteras del ), defendió la importancia de todas ellas.
